Cooperación Sur- Sur, una herramienta que reconfigura la cooperación internacional

Por: Observatorio de Cooperación Internacional

El Observatorio de Cooperación Internacional para el Desarrollo del Instituto Mora llevó a cabo el evento Mesa de diálogo: Resultados del PABA +40. Segunda Conferencia de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Cooperación Sur-Sur y Triangular y Desafíos desde México. Evento durante el que se ofreció una discusión enriquecedora acerca de los principales hallazgos, retos y oportunidades sobre la Segunda Conferencia, realizado en Buenos Aires, Argentina, en marzo de este año, y cuyo tema central consistió en la vinculación de la cooperación Sur-Sur y Triangular (CSST) con la Agenda 2030.

La mesa de diálogo se desarrolló el día 9 de mayo, en el salón 6 de la sede Poussin del Instituto Mora y participaron, el Dr. Jorge Pérez de la Universidad Anáhuac, la Mtra. María Rodríguez de la AMEXCID, la Mtra. Laura Becerra por parte Equipo Pueblo y la Mtra. Citlali Ayala del Instituto Mora.

Para la Mtra. Ayala, el evento del PABA +40 realizado en Buenos Aires, sirvió entre otras cosas, para reiterar la validez de la CSST como herramienta para impulsar el desarrollo, de fortalecimiento institucional y con carácter horizontal. El evento sirvió también, para describir avances de las políticas de cooperación en los países de renta media en el tema, sin embargo, no se cuestionó el alcance actual de algunos principios de CSS, como la condicionalidad y el papel de la CSS en temas como la gestión para resultados.

En la mesa de diálogo realizada en el Instituto Mora, otros temas de debate fueron: la vinculación de las acciones de CSST enfocadas al cumplimiento de los 17 ODS. En el diálogo, dicha cooperación encuentra un área de oportunidad bastante importante para implementar proyectos y programas que den solución a problemáticas, especialmente a nivel local. Otra opinión compartida fue que la cooperación, en general, se encuentra atravesando una crisis, por lo cual es necesaria una reestructuración teórica y práctica para hacer cooperación.

Otro tema fue la movilización de recursos. Ante esto, no se habla solo de la movilización de recursos económicos, mismos que son importantes para realizar proyectos, sino también de recursos humanos y tecnológicos. Además de necesitar que se aumenten recursos económicos, es igual de importante establecer nuevas estrategias de acción, y que haya un mayor impacto de las acciones implementadas dentro de la CSST.

En cuanto a la situación actual México, considerando que existe una nueva administración, es necesario que el gobierno establezca con más claridad el papel que la cooperación puede realizar, ya sea como herramienta de desarrollo y parte de la política exterior. Se hizo énfasis en el papel de México para potenciar la CSST a nivel de la región de América Latina, en especial para el impulso de acciones conjuntas para Centroamérica.

Así mismo, se expresó la necesidad de que la AMEXCID cuente con más atribuciones de las actuales, ya que constituye el pilar fundamental como institución rectora, en cuanto a la política de la cooperación mexicana. En opiniones encontradas, por un lado, la institución necesitaría de más atribuciones y acorde a las necesidades actuales del país; en otro sentido, podría ser más necesario fortalecer las capacidades actuales y no perder personal clave y capacitado para atender sus tareas asignadas, así como gestionar mayor acceso a recursos económicos. A la vez que se generen nuevas alianzas y horizontes, para alcanzar los compromisos de la Agenda 2030.

De parte de la AMEXCID, la Mtra. Rodriguez, compartió diversos proyectos que la institución se encuentra generando en favor de impulsar la integración de otros actores no tradicionales en los temas de cooperación internacional, entre ellos: Alianza por la Sostenibilidad, como proyecto que integra al sector privado en la generación de acciones vinculados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS);  la incorporación de Organizaciones de la Sociedad Civil como parte la comitiva de México en diversos eventos internacionales, por último, el Ejercicio de Monitoreo de la Eficacia de la Cooperación Sur- Sur realizado por la AMEXCID, el cual se puede visitar en el siguiente enlace: https://www.gob.mx/amexcid/documentos/ejercicio-de-monitoreo-de-la-eficacia-de-la-cooperacion-sur-sur

Como representante de la Sociedad Civil, algunas consideraciones de la Mtra. Laura Becerra, consistieron en seguir abriendo espacios para la Sociedad Civil, no solamente en espacios como la Agenda 2030, sino en otras agendas internacionales. Es necesario realizar un cuestionamiento al modelo actual de desarrollo y mejorar la transparencia y las evaluaciones para la CSS. Como parte de los resultados de la Alianza de las OSC la Mtra. Laura Becerra comparte el informe preliminar del trabajo realizado desde el Observatorio Regional de la AOED, para sistematizar las experiencias y percepciones de las organizaciones de la sociedad civil en la región latinoamericana en torno a la agenda de CSS- ODS.  Más información del informe en el siguiente enlace:  http://observacoop.org.mx/wp-content/uploads/2019/05/Cooperacion_Sur_Sur_Espanol-Observatorio-Regional.pdf 

La CSS como respuesta a un nuevo orden mundial

La Cooperación Sur-Sur surge en un contexto donde, a raíz de la Conferencia de Bandung en 1955, aparece el llamado Tercer Mundo, concepto que sugería la existencia de una tercera opción entre el Primer Mundo o capitalista y el Segundo Mundo o socialista, por la necesidad de reducir las asimetrías en las relaciones internacionales. Ante esto, se origina una especie de reclamo con el fin de establecer un nuevo orden económico, en la cual existiera también, una complementación o contraposición, hacia el modelo tradicional de cooperación Norte-Sur.

La CSS puede considerarse como una modalidad cooperativa orientada a reforzar las relaciones bilaterales y la formación de coaliciones entre países del Sur. La CSS crea una solidaridad entre países en desarrollo y se orienta a garantizar la auto-suficiencia nacional y la integración de los países en desarrollo en la economía mundial.

Durante los sesenta y setenta la Cooperación Técnica entre Países en Desarrollo (CTPD) se constituyó como un esfuerzo asociativo pionero entre países del Sur en la búsqueda de relaciones internacionales más justas y modos alternativos de vinculación que contribuyeran a promover su propio desarrollo. Esta aspiración se tradujo en un hito fundamental para impulsar lo que actualmente constituye uno de los pilares de la hoy denominada Cooperación Sur-Sur: la aprobación del Plan de Acción de Buenos Aires para Promover y Realizar la Cooperación Técnica entre los Países en Desarrollo (PABA), como resultado de la Conferencia de Naciones Unidas sobre CTPD celebrada en aquella ciudad en 1978.

Firmado por 138 Estados, el PABA tenía como principal objetivo promover la CTPD, valorando la creciente importancia de las relaciones Sur-Sur y demandando una participación igual y soberana en la conducción de las relaciones internacionales.

Acontecidos 40 años de la adopción del PABA, el escenario internacional se encuentra marcado, entre otros elementos, por la creciente influencia de los países en desarrollo y la integración de otros actores no tradicionales como el sector privado y la sociedad civil, así como por la relevancia adquirida por la CSS y otros enfoques teóricos y prácticos que cuestionan el actual modelo de desarrollo económico.

Para más información acerca de la Mesa de Diálogo, visita el enlace: https://www.youtube.com/watch?v=lOuiuO4j9e4

 

Para más información sobre el PABA +40 visita: https://www.unsouthsouth.org/category/bapa40-es/?lang=es

 

 

https://www.ceibal.edu.uy/es/articulo/el-aporte-de-plan-ceibal-los-objetivos-de-desarrollo-sostenible